Elaborado por Eduardo Aguiñaga, profesor de EGADE Business School e investigador del Grupo de Investigación-Área Temática en Innovación Social y Sostenibilidad de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey.
Las épocas vacacionales son probablemente los momentos más esperados por todos. Seas niño, joven o adulto, son ese momento para romper la rutina, disfrutar con la familia, así como “recargar” energía. Son tan importantes para la salud física y mental, que algunos estudios han encontrado que el no tomarlas al menos una vez al año se asocia con enfermedades o incluso muerte prematura (Gump y Matthews, 2000).
Más allá de sus beneficios, es importante reflexionar qué impactos pueden las vacaciones tener para el medio ambiente y para la sociedad. Es a raíz de esto que surge lo que llamamos el turismo sustentable.
La Organización Mundial del Turismo lo define como aquel “que tiene plenamente en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y medioambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, de la industria, del entorno y de las comunidades anfitrionas”. Dicho de otra forma, este tipo de actividad turística busca un equilibrio en el impacto que tiene la industria en las tres dimensiones: social, económica y ambiental.
Lamentablemente, en lo ambiental el impacto es tangible, aunque pocas veces percibido. Por ejemplo, tan solo un vuelo redondo Monterrey-Cancún emite alrededor de 280 kg de CO2 por persona. Para mitigar estos gases de efecto invernadero, se requieren 28 árboles capturando CO2 durante un año. En el aspecto social, la turistificación desplaza a residentes por el aumento en la actividad turística, resultando en la dilución de la cultura local, daño a lugares históricos y conflictos entre residentes y turistas (Wen, Fu, Diao, et al., 2023).
Por lo anterior, comparto algunas de estas recomendaciones para disfrutar de unas vacaciones sustentables:
- Investiga antes de reservar. Busca proveedores de servicios turísticos con certificaciones ambientales reconocidas como Green Key, EarthCheck o Travelife, que evalúan la gestión de energía, agua, residuos, conservación de la biodiversidad y prácticas sociales responsables.
- Apoyo a las comunidades. Elije empresas locales y artesanos, y consume en restaurantes locales. Esto ayudará a fortalecer la economía local y preservar la cultura.
- Minimiza tu huella ambiental. Durante tu estancia, toma medidas para reducir tu impacto ambiental, como ahorrar agua y energía, y evitar el desperdicio de alimentos y recursos.
- Elige transportes sustentables. Opta por medios de transporte, como el tren o el autobús, en lugar de vuelos de corta distancia.
- Practica el turismo responsable. Procura actividades turísticas que promuevan la conservación del medio ambiente y el bienestar de las comunidades locales, como recorridos de observación de aves o programas de voluntariado.
México cuenta con una rica oferta turística que incluye desde playas paradisíacas hasta ciudades históricas y exuberante naturaleza. Contribuyamos a su conservación natural, cultural y social para el beneficio de todas y todos, redefiniendo nuestras vacaciones para un futuro sustentable.
Publicado originalmente en Empresas Verdes.